Morado y fucsia. A rayas horizontales que a su vez son atravesadas por finas rayitas verticales. Se trata de una camiseta compuesta por fotos de la ciudad, todas con un filtro que va del azul al rosa pasando por el morado. Se trata de las que conforman la constelación del Dragón, un guiño al símbolo y apodo del equipo portista. Como en los últimos años, una interesante exposición de los uniformes que vamos a ver en la temporada. Juanka, Edu se refiere a la camiseta de la 91/92. La temporada en que el Barcelona ganó su primera Copa de Europa, aunque no la pudo lucir en la final por coincidencia de colores con la Sampdoria, sí en la celebración y recogida del trofeo. En esta campaña en la que el Madrid volvió a perder por segunda temporada consecutiva en Tenerife y dejó escapar la Liga en el último suspiro, los jugadores llevaron camiseta Hummel con la publicidad de Teka. La equipación suplente no es una elección tan buena, se ve a la legua que su única función es lucirla en partidos de escasa relevancia. Habrá que ver cómo queda en el terreno de juego, pero mucho me temo que en los partidos nocturnos se va a ver más bien poco.
El partido se ha detenido unos segundos para revisar otra caída de Trincao dentro del área, pero el VAR dice que el contacto con Fran García no es suficiente. Por lo tanto, podrá evitar imágenes como la del partido de Europa League contra el Eintracht, donde 30.000 aficionados alemanes tiñeron de blanco el Camp Nou, pero deberá permitir el acceso a la afición rival. Otra ‘joyita’ que he encontrado ha sido la tercera equipación del Girondins de Burdeos. Entre este articulo y otros como el que publicaste en su día denunciando la masacre de aves por parte de los parques eólicos, sin informarte bien, apoyandote en un video (en aquella ocasión) y en un articulo periodistico ajeno (en esta), le haces un pobre favor al medio ambiente con semejantes idioteces. Con él ganó, entre otros títulos, tres Balones de Oro, dos Botas de Oro y dos Champions League. Por otro lado, cabe destacar que las tres rayas de Adidas vuelven a ser grises, solo que esta vez no van en los hombros, sino en los laterales de la camiseta.
En primer lugar, me ha llamado la atención de la segunda equipación del Oporto (o Porto, que uno no sabe muy bien si está pasado de moda españolizar el nombre). Destacar, por ejemplo, la sorprendente propuesta del Oporto en su segunda equipación, con un color que han venido a llamar ‘cacao’ pero que es marrón, tonalidad muy poco vista en el mundo del fútbol. Diseño sencillo el del Sevilla, con el añadido de los botones que le da un toque vintage. En primer lugar, y con algo de retraso, el absolutamente inenarrable uniforme del CD Palencia para el playoff de ascenso a 2ª B. Bien está lo que bien acaba, porque el equipo castellano ha logrado subir, pero ese diseño de Kappa que recrea la musculatura humana es un paso más en esas líneas que equipos como La Hoya-Lorca (el brócoli), el Guijuelo (el jamón), el Lugo (el pulpo y la caña) o la Cultural Leonesa (el esmoquin) marcaron en temporadas anteriores. Sobre el segundo uniforme del Atlético, me recuerda a la edición Deluxe del Megazord, en la que todas las piezas eran de color negro con adornos dorados. Es el caso del tercer uniforme del Sunderland. El caso del equipo lombardo es el contrario que el del piamontés.
Ahora, la que se lleva el primer premio en la liga española es la 2ª equipación vintage del Depor. Ahora, lo que más me llama la atención es el patrocinador, es imposible no centrar la atención en esas letras (¿chinas?). A los poco menos de diez de coste de fabricación y distribución hay que sumar lo que se conoce como “el margen del spónsor técnico”, es decir, el dinero que paga Nike, Adidas, Puma o cualquier otra marca para aparecer en la camiseta del equipo. El equipo que desde este año va a estar dirigido por Unai Emery lleva nada menos que 27 años vinculado a Nike. Tal vez el diseño no sea como los de Umbro, camisetas de futbol pero no es en este equipo donde Nike ha cometido auténticas ofensas visuales. El presidente del club turco, Ali Koç, decide apartarle del equipo por bajo rendimiento, falta de disciplina y estar más preocupado por sus asuntos comerciales. Por cierto, que no es la primera vez que se ve algo así en el mundo del deporte. La venta de publicidad aportó al regulador internacional 180,2 millones de dólares (170,8 millones de euros) en 2021. Es su partida de ingresos más relevante, por encima incluso de la televisión, con la que facturó 131,3 millones de dólares (124,4 millones de euros) el año pasado.